Ser de Mundo Mejor no es algo que termina después de cinco años de educación en nuestras aulas; es algo que se lleva toda la vida en el corazón, la conducta ciudadana, el desarrollo profesional y los valores que inculcamos a nuestros hijos.
Hemos cantado por cinco años “de Chimbote somos la esperanza” y, sin jactancia ni falsa modestia, podemos afirmar que los profesionales, empresarios, comerciantes, padres y madres de familia, hombres y mujeres de calidad humana son nuestra mayor riqueza. Hoy en día hay Mundomejorianos por los cuatro rincones del mundo, transmitiendo los mismos valores que aprendimos de los Hermanos Cristianos, de los directivos y profesores de nuestro querido colegio de la Avenida Meiggs.
La solidaridad fue el distintivo del Beato Edmundo Rice, siguiendo su ejemplo nuestros ex-alumnos están dando muestras palpables de su compromiso con la educación de los menos afortunados. Estamos profundamente agradecidos a aquellos mundomejorianos que se acercan a ofrecer su ayuda y nos permiten continuar con varios proyectos por los cuales más jóvenes en el presente compartan la misma educación de calidad que los ex-alumnos recibieron en el pasado.
El Proyecto Edmundo Rice es un modo concreto de hacer asequible un colegio privado, de la calidad del Mundo Mejor, a las familias que padecen las consecuencias del desempleo, la disminución de la pesca y otras dificultades económicas.
Gracias a todos los ex – alumnos que nos han hecho llegar sus aportes económicos para el proyecto Edmundo Rice. Ustedes, amigos, aprendieron bien lo que es: “Lo que hagamos por Dios, por más pequeño que sea, estemos seguros que Él nunca lo olvidará ni dejará sin recompensa…” (Beato Edmundo Rice).